martes, 22 de septiembre de 2015

Caminemos…

       Cuando aún era un infante, no podía entender todo esto. No cabía en mi pequeña cabeza todos los comportamientos variados de distintas personas ante una misma situación. Algunos excéntricos, otros inesperados, algunos comunes…

Entonces era cuando escogía el aislamiento y desde allí trataba de  observar las vivencias. Sin decir palabra. Pienso que mucha gente hace eso en algunas ocasiones que se ocupa la reflexión y el pensamiento. Entonces fue cuando me nació la inquietud de que en algún punto de mi ciclo de vida;  antes de dar el gran salto, plasmar todo este tipo de ideas que rondaban mi cabeza desde como ya indiqué, temprana edad.

Debo decir que toda esa idea de expresar mis ideas no fue planeada. Solo quería que alguien más lo supiera de alguna manera. Indudablemente no soy un erudito. Solo expreso lo que pienso.

Después de dar tantas vueltas al asunto, pensando cuál es el epicentro ó punto de quiebre del ser humano, desde donde empieza a torcerse o crecer adecuadamente, caí en lo siguiente: es sin duda para mí la niñez (como en alguna entrada anterior, quizá lo dije). Desde que el infante tiene uso de razón. A veces, desde antes de esa etapa.

Tomando solo como referencia mis observaciones, me arriesgo quizá demasiado al mencionar que le doy más importancia aún, al periodo de vida a partir de que se tiene uso de razón. Porqué me arriesgo? Porque aún tengo mis dudas sobre si queda “guardado” algo en nuestra cabeza de la etapa anterior. Esto es, claro, sin tomar en cuenta las opiniones de los estudiosos. Que sin duda, dirían que sí queda algo de esa etapa. Yo en la vivencia real sin tomar en cuenta los libros, guardo mis dudas. No apruebo, pero tampoco desapruebo.


Y entonces es cuando se pone “color de hormiga” el asunto. Frase común que decimos en mi pueblo, cuando algo empieza a ponerse muy difícil. La razón? Cómo le enseñas a un infante que aún no puede a veces ni hablar bien, a entender toda esta maraña? Labor titánica sin duda, para los que lo han hecho. Si es que hay alguien por allí que lo ha realizado con sumo éxito. “Me quito el sombrero”  jejejeje . Otra frase que decimos localmente para decir “te respeto por lograr hacer algo muy difícil”.

martes, 14 de julio de 2015

Aún en el sendero.

Continuando con el presente blog de locos, y siguiendo con el tema de la entrada anterior, me pregunto una y otra vez, ¿porqué le enseñamos a una semilla nueva, sin antecedentes, a veces sin querer (por eso debemos de razonar lo que decimos antes de hablar y/o hacer) todo lo que no debe de saber? Umm es una pregunta larga, lo sé.

Y si hacemos casi todo al revés ¿porqué esperamos que éste no vuelva a repetir comportamientos no adecuados por decirlo de alguna manera?

 …y así comienza una cadena sin fin…

Alguna vez en tu vida has oído o visto esto:


Episodio 1: Es de noche.  Un infante va a su cuarto a dormir.
Episodio 2: En la madrugada tiene la necesidad de ir al baño.
Episodio 3: Decide hacerse en su cama o aguantar porque está oscuro.


¿Pooorqueee?


La respuesta es sencilla: alguien le sembró la idea con ejemplo o palabra que la oscuridad era “mala”  por lo tanto hay que temerle. Y como es un infante, pues su imaginación está al cien por ciento y de su cuenta añade todos los “efectos especiales de terror”  

Es un ejemplo sencillo de todo lo que puede en su cabeza crearse un niño. ¿ Pero porqué tiene que ser para mal?, ¿no podríamos sembrarle ideas distintas?

Y encima de todo lo regañamos por haberse aguantado o hecho en sus ropas.


Ahora imaginemos a todos esas personas que alguna vez fueron niños y que ahora en su estado adulto, aún arrastran ese u otro tipo de creencias…

martes, 23 de junio de 2015

Ok.

De nuevo continuando con la primera entrada. He tardado demasiado para mi gusto en continuar con la publicación. Pero es que es tan delicado lo que continúa a la anterior entrada, es decir a la niñez en específico; que por más que he tratado de encontrar un comienzo a este escrito no había logrado dar con una arista que embonara exactamente con lo que deseo expresar.

Lo siento.

Me he puesto a escribir en un cuaderno viejo –como le llaman algunos- una especie de estructura o mapa mental para orientarme un poquito. Recordar que no soy una persona erudita, solo plasmo lo que pienso. Y voilá! Parece que lo tengo.

Continuemos pues.

Cuando escribí que la niñez era una especie de cuarto donde se labran personitas y es el inicio del todo, es porque desde mi punto de vista esta etapa tiene el más alto porcentaje de peso en un individuo en cuanto a su forma de ser, ver las cosas y situaciones a la redonda en el lapso que le toque estar en esta tierra.

Es como cuando imprimimos en un índice de un libro todo lo que contendrá éste después en su desarrollo. O cuando desarrollamos un software, pues desde un inicio definimos lo que deseamos que haga éste. Ah! Pero la variante aquí es que un individuo es altamente complejo e inmensamente impredecible. Por lo tanto por dónde empezar?

Seamos humildes, hagamos una crítica constructiva y aceptemos que muchas personas ni siquiera le toman o tomamos importancia a que los infantes tienen un “yo” interno, y que es mucho más importante labrar ese “yo” a esa etapa que cuando ya se es adulto. Creemos que su bienestar será el tener cosas materiales y que nada le falte. Pero luego en muchas ocasiones nos damos de topes contra la pared una vez transcurrido el tiempo y pensamos en el famoso “hubiera”.

Y a sufrir y echar culpas por aquí y por allá… cual hojas al viento en una tarde de verano. Y Como decimos en mi tierra “ya para qué” .

Porque cuando ya se es grande, por decirlo de alguna manera, ya se traen vicios ocultos, miedos, ideas implantadas… como las construcciones que se promueven como nuevas y por debajo de la fachada  tienen grietas maquilladas o cimientos ya flojos los cuales terminarán por dañarse o derrumbarse tarde o temprano. O en el último de los casos, están las paredes eternamente recargadas sobre otra cimentación que si está construida correctamente. Por lo tanto, están mermando a ésta última. Y curiosamente el dueño de la pared que carga es el ultimo en saberlo. Hasta que empieza a ver que algo está mal porque ya se le está dañando una parte de su casa. O en casos extremos, muere sin saberlo. Suena familiar esto? Yo creo que a mas de alguno, sí.

En diferentes situaciones o con personas distintas. En el trabajo, la pareja, los amigos, en fin donde haya personas pues.
 Pero sí. Sí es familiar. 

jueves, 14 de mayo de 2015

Iniciando

Te has preguntado alguna vez en tu vida, quien eres?, que es lo que califican de ti las personas que te conocen y aprueban y las que no? y que tal en un exámen psicologico que según eso "no pasaste"?

Este blog lo escribo sin ningún afan, mas que el de compartirte esas cosas que nos suceden mientras estamos instalados aún en esta vida y que básicamente no se pueden contar con casi ninguna persona, al menos que seas inmune a que te vean "raro" o que te digan "creo que no tienes todas las tuercas bien apretadas jejejeje"

No podemos regresar al pasado y cambiar lo que la sociedad ha implantado durante generaciones y mas generaciones. Tampoco tirar anquilosadas costumbres, ideas implantadas y qué se yo que más, de la noche a la mañana.

Pero el pensamiento es libre y podemos ser felices dentro de nosotros si así lo queremos. Hay que querer! Sin dañar a nadie. incluso en silencio... ah verdad? si existe un gran porcentaje de personas que sufren en silencio y no sé que mas cosas; porque no ser  "feliz en silencio" si no lo podemos externar a veces?  Porqué ese afán de vivir azotados con quejas de tooodo? y de estar "jeta" en este mundo deseando cosas que ni se necesitan.

Un ejemplo burdo: quien dijo que si en un exámen psicometrico apareces como no apto para alguna tarea a desarrollar,  sea "verdad" lo que dicen esas pruebas?

Considero que está bien que haya ese tipo de mediciones, pero sin embargo también añado a eso que cada persona es unica sobre todo en su universo interno. Y aunque existen similitudes algunas veces con otros individuos, no creo que sean iguales las percepciones. Porque entran en juego muchos factores que naturalmente no van a coincidir. Por lo que todas las veces que te digan "no eres apto", no te lo creas y  no actúes como si eso fuera verdad.  

Lo que para una persona significa "zapato" no quiere decir que sea del mismo color, tamaño, tipo, diseño bla,bla,bla para otra. Yo hasta me imaginé zapatos de otras épocas cuando la realeza (varones) usaban sus taconcitos .

Tampoco empieces con esa telenovela en la cabeza donde el perdedor eres tu y tu y al final tu. El ejemplo anterior es muy simple como ya lo dije, pero aplica para todas las cosas que te sucedan en la vida, no simplemente cuando entre en juego un exámen de ese tipo. Puedo nombrar numerosos ejemplos que acontecen durante nuestro trayecto aquí.

Si empezamos con un poco de orden cronologico (por llevar alguno), pues naturalmente empezamos en la niñez. Uyyy esta etapa la considero como el cuarto en donde se labran y templan personitas. Entonces es como el inicio del todo. Uyyy